El expresidente catalán gana contra la marca andaluza “Pig Demont”.
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Hace unos pocos meses, Puigdemont, el expresidente catalán fugado, se opuso vía su abogado al registro de la marca “Pig Demont”. El empresario andaluz decidió recurrir la decisión de suspensión de su marca y todos esperaban con los nervios en vilo la respuesta. La conclusión de la Oficina de Patentes y Marcas ya es final: se le ha denegado al Sr. González López el registro del logotipo del cerdo y del nombre “Pig Demont”, ya que se parecen demasiado a Puigdemont.
Esto es tanto una pena como un evento bastante divertido. Es una pena, ya que el emprendedor tendrá que quitar las pegatinas que tienen la imagen y el nombre del expresidente. Pero, por otro lado, resulta divertido ya que el propio Puigdemont se identifica con el nombre y la cara del cerdo demandado.
En su página web, el empresario especifica que planea recurrir la decisión de la Oficina de Patentes y Marcas y que en los próximos días abrirá una nueva página web sin usar el logotipo ni la marca no registrados.
Es una pena que parezca que la justicia solo va por un camino, en contra de los ciudadanos normales, mientras que los delincuentes reales como Puigdemont y compañía siguen todavía en libertad.
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